Los primeros arcades (o «marcianitos») supusieron una revolución. Era cosa de magia, pero magia literal, ya que determinadas máquinas hacían uso de técnicas de ilusionismo de la época victoriana.
– Mira, estoy emulando en el Mame el Space Invaders, ¿te acuerdas?
– ¿Einn? ¿Pero que es esa castaña? ¿Y en blanco y negro??¡Si era en color! Y había un fondo espacial superchulo, con una especie de luna…
Si este es el recuerdo que tienes del Space Invaders… ¡Te engañaron! (ópticamente hablando)